Archivo de la categoría: meditación

Lograr una actitud zen

¿Qué te saca de tus casillas?

Ojalá logre que no exista nada que me altere hasta sacarme de mis casillas. Lamentablemente, no he conseguido (todavía) ese estado zen que me permita mantener una actitud de aceptación ante la vida y la necesaria serenidad. 
Siempre me digo a mi misma que no debo permitir que determinadas cosas o actitudes  me saquen de  mis casillas pero cuando me encuentro con una falta de lealtad, una actitud irrespetuosa o una muestra de estupidez, la verdad es que pierdo el «oremus».
Cuando soy consciente de que  he permitido que me saquen de mis casillas, me arrepiento y me repito a mi misma que esa no es la actitud, que debo cuidar de mi paz interior y mi bienestar. ¡Ojalá lo logre!

Lo verdaderamente importante

¿A qué te gustaría dedicar más tiempo todos los días?

Puede que suene muy egoísta, pero realmente me gustaría dedicar más tiempo a mi  misma.
Tiempo para centrarme en mis objetivos, tiempo para enfocar mi atención en nuevos temas, tiempo para cuidar mi estado  físico y psiquico.
Parece sencillo ¿verdad? No es una meta tan ambiciosa pero la realidad es otra, la vida es más complicada y exigente por lo que dedicamos mucho más tiempo a cuestiones a veces irrelevantes en lugar de centrarnos en lo que realmente nos importa
No nos lo impide nadie, somos nosotros mismos los que al involucrarnos en demasiadas cuestiones, olvidamos lo verdaderamente importante.
,

Ser madre

¿Qué experiencias te han hecho crecer más?

Sin duda, la experiencia que me hizo cambiar radicalmente ha sido el ser madre. Mi vida cambió y yo maduré de un día para otro y a partir de entonces soy otra persona, no voy a decir decir que mejor pero sí presa de un amor distinto a todo por aquel bebé tan pequeño que parecía un muñequito y que muchos años después sigue siendo ese amor distinto, que a veces ha sido un acicate que ha hecho que me esfuerce mas allá  de lo que jamás pensé que sería capaz y en otras ocasiones, ha sido la causa de que de un paso a un lado, solamente por su felicidad.

No es una vaca cualquiera

¿Cuál es tu animal favorito?

En Vargas, la hacienda de mis abuelos, había caballos, ovejas, cabras y vacas. Siempre me han gustado las vacas, aunque yo adoro los caballos, había una vaca que se llamaba «La Coloreta» por la que sentía especial predilección. Si durante mis paseos por los prados la encontraba pastando, en seguida se acercaba a saludar. Siempre pastaba con otras cuatro o cinco pero «La Coloreta» era la única que dejaba de pastar y se acercaba a mi para que la acariciara.
Es uno de mis recuerdos más entrañables de la infancia y quizá por ello nunca he tenido otro animal favorito, ella no era una vaca cualquiera.

¿Tiempo Perdido o Tiempo Ganado?

Si no necesitaras dormir, ¿qué harías con ese tiempo extra?

Cuando era una niña chiquita no quería irme a la cama porque creía que si me dormía, seguro que me perdería algo importante. Al hacerme mayor siempre he tenido la impresión de que todo el tiempo robado al sueño para leer, es tiempo ganado para aprender y disfrutar con los libros.
Lógicamente entiendo que a pesar de ser bastante insomne, dormir no sólo es importante sino imprescindible para la salud tanto física como mental.
Lo se, lo entiendo pero me es imposible irme a la cama pronto, esas horas de la noche me pertenecen, es un tiempo para mi, para leer o para soñar.

CALMA, REFLEXIÓN Y LECTURA

¿Cuál es tu momento favorito del día?

Mi momento especial es la media noche cuando hay silencio y calma, es el tiempo de reflexión, tranquilidad, descanso y lectura o meditación.
Soy noctámbula y es la hora en la que mientras el mundo duerme, yo hago repaso de lo ocurrido en el día, el avance en el cumplimiento de mis objetivos o si no estoy por la labor, simplemente me dedico a la lectura o a la comunicación con mi familia que está en Colombia, ya que por la diferencia horaria, la media noche española es media tarde en América, un momento perfecto para la conversación con ese lado del mundo.
Es mi momento para todo aquello que requiere calma, sosiego y reflexión.

¿ESTAR CONMIGO MISMA?

¿Qué te hace sentir en paz?

Encuentro la paz en la certeza de que todos los míos están bien. También la encuentro en algún proyecto profesional creativo. Entonces realmente estoy en paz con el universo.
Pero no siempre se logra controlar todo, entonces busco momentos que me hacen sentir en paz. ¿Y que me la proporciona? Se trata de actos muy simples como caminar por el Parque del Retiro, disfrutar de una sesión en el Hamman, eso sí con masaje incluido, o ir al gimnasio a gastar esas energías que en algún momento siento que me sobran.
Otro camino para alcanzar la paz es sencillamente meditar.
Y hablando de meditación, al menos para mí, no es un tema fácil. A veces tengo la sensación de que me mente es como una centrifugadora de ideas y apartarlas para centrarme y meditar, es un reto.
La madurez me ha enseñado que debo buscar esos momentos de reflexión y a estar conmigo misma.

Pueden ser pequeñas cosas

Di 30 cosas que te hagan feliz.

Para mi la felicidad está compuesta de pequeñas cosas, a veces irrelevantes para los demás, a veces frivolas pero todas importantes para mí. Desde luego son más de treinta pero veamos esas treinta:
1. Comida en familia
2. Bailar sola
3. Leer un libro apasionante.
4. Escuchar música mientras hago ejercicio
5. Meditar
6. Cuidar las plantas del patio
7. Cocinar inventando recetas
8. Mi clase de Pilates
9. Unas risas con mi marido
10. Escuchar la radio
11. Escribir uno de mis libros
12. Corregir el libro de un amigo
13. Viajar
14. Ir de compras
15. Ver una película
17. Caminar por el Retiro
18. Encender una vela
19. Hablar con mi familia colombiana
20. Invitar a los amigos
21. Un bañito en la piscina
22. Acostarme tarde
23. Levantarme tarde
24. Que me hagan la manicura
25. Visitar el Jardín Botánico
26. Asistir a exposiciones
27. Ir a los toros
28. Estrenar un vestido
29. Articular un buen discurso
30. Romper barreras

La salud mental es lo más importante

¿Qué estrategias sigues para mantener tu salud y bienestar?

Creo que nunca se hace lo suficiente para cuidarse a uno mismo, aunque también creo que no hay que pasarse.
Efectivamente para tener una buena salud, es necesaria una cierta disciplina respecto a la alimentación, el sueño y la actividad física; asimismo es imprescindible cuidar la salud mental porque de ésta depende todo lo demás.
Respecto de la alimentación detesto aquello de ser tan rígidos que nos impida darnos alguna alegría puntual, hay que comer de todo en las justas proporciones y si alguna vez, nos saltamos la norma para darnos una alegría, pues bienvenida sea.
Por supuesto, la actividad física es importante porque de nada sirve un régimen alimenticio impecable si pasamos el día aplastados en el sofá. Pero como en todo, debe imperar el sentido común y salvo que te vayas a presentar a las Olimpiadas de París, el ejercicio físico tiene que estar en el límite de lo razonable, evitando sobreesfuerzos y lesiones.
En cuanto a las horas dedicadas al descanso, está establecido aquello de las ocho horas de sueño aunque hay matices a tener en cuenta, como por ejemplo la calidad del sueño y si somos búhos o alondras y sobre todo, el sueño depende en gran medida del estado anímico. Si vivimos presas de un permanente estado de ansiedad, difícilmente podremos conciliar un sueño reparador, si no descansamos, podemos caer en un estado bulímico más o menos leve, o por el contrario, nos sentiremos más o menos desganado incluso para realizar cualquier actividad física o intelectual; es la pescadilla que se muerde la cola.
Del estado anímico depende todo. Por ello, parece razonable pensar que nos debemos volcar en cuidar la salud mental